(Opinión personal) Muy buenas tardes desde locura de lectura. Y volviendo a mis reseñas, esas que creo que nunca dejaré de escribir, os traigo El chico que dibujaba constelaciones. Una historia cotidiana cargada de sentimiento que, como la vida misma, tiene un final. Porque nada es para siempre, porque todo acaba, porque así es el ciclo de la vida, y porque así ha de ser.
Esta es la historia de Valentina y Gabriel, y de todos los acontecimientos importantes de sus vidas hasta nuestros días. Así de sencillo, así de normal. ¿Una historia edulcorada? Sí. ¿Predecible? También. ¿Tierna e idealizada? Por supuesto. Pero que me ha sorprendido y mucho, porque, ¿Cómo es posible que me haya hecho llorar? Una trama que aunque entretenida, no había conseguido engancharme, y de repente me veo completamente abducida y no solo eso, sino que además me arranca una lágrima... Porque conmueve y mucho, porque te hace reflexionar sobre la vida, el amor, la familia, y porque sinceramente, es una historia preciosa. Rotundamente bonita.
Todo comienza en la ciudad que me vio nacer, Madrid (y solo con esto ya me tiene ganada). Corren los años 60 y algo tan sencillo como chico conoce a chica, se convierte en la historia de toda una vida. Y aquí podría terminar mi reseña porque lo que viene después no hace falta que te lo cuente. Vinieron los convulsos años 70, diez años después mis maravillosos 80, plena adolescencia en los 90, aquellos que avecinaban un glorioso cambio de siglo, y sin darnos cuenta llegamos al 2000. Afortunadamente seguimos sumando décadas y espero que por mucho tiempo. Curioso que haya empezado a hablar de los años con los que comienza la novela, y que haya continuado trasladando las décadas a mi edad, es decir, he mezclado sus años con los míos. Es inevitable no sentirse identificado con los personajes, y más inevitable aun no hacer de sus décadas las tuyas propias. Me ha ocurrido en la lectura y me vuelve a ocurrir en la reseña.
No soy nada fan de la novela romántica, pero siempre digo que muy de vez en cuando sientan tan bien, son tan necesarias y calan tanto que, bienvenidas sean. Así que si tú lo eres, y disfrutas de éste género literario, El chico que dibujaba constelaciones te va a apasionar. Eso sí, ve preparando pañuelos porque los vas a necesitar.
Tan recomendable para nostálgicos...
Y hasta aquí mi recomendación de hoy. Besos y feliz Domingo!
SINOPSIS
Esta es una historia de amor, de sueños y de vida. La de Valentina. La chica que no sabía que tenía el mundo a sus pies, la que creció y empezó a pensar en imposibles. La que cazaba estrellas, la que anhelaba más, la que tropezó con él. Con Gabriel. El chico que dibujaba constelaciones, el valiente e idealista, el que confió en las palabras «para siempre», y creó los pilares que terminaron sosteniendo el pasado, el ahora, lo que fueron y los recuerdos que se convertirán en polvo.
Pues de vez en cuanto me gusta disfrutar de una buena historia romántica, así que tomo nota. Prepararé los pañuelos.
ResponderEliminarBesotes!!!
La verdad es que no es el tipo de género que suelo leer, pero de vez en cuando cae algo... así que lo anoto.
ResponderEliminarBesotes
Este tipo de libros es como las películas de domingo por la tarde, pasas un buen ratillo y desconectas de la realidad que nos rodea.
ResponderEliminarUn abrazo
Este tipo de libros es como las películas de domingo por la tarde, pasas un buen ratillo y desconectas de la realidad que nos rodea.
ResponderEliminarUn abrazo
Ese libro me gusto mucho cuando lo leí. Lo recomiendo.
ResponderEliminarNo soy tan fan de este tipo de libros, pero me gusto tu reseña. Espero darme un tiempo y leerlo.
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