(Opinión personal) Los que me conocéis sabéis que soy una apasionada del álbum ilustrado. No sé si la nostalgia llama a mi puerta y si la añoranza se apodera de mí, quizá porque a mi alrededor revolotean recuerdos de una infancia lejana, el caso es que me enloquecen. Todos ellos tienen algo especial, con todos ellos aprendes, sonríes, te envuelven con su halo de calidez y magia, y te dejas llevar hasta donde ellos quieran llevarte. Así es. La niña que caminaba entre aromas es uno de esos álbumes ilustrados de los que te hablo, y es que cuando un relato te hace volar de la forma en la que esta entrañable historia lo hace, estás perdida. Ternura, bondad, sencillez y hechizo se mezclan entre sí para devolvernos una profunda historia en forma de cuento. Un cuento que todos deberíamos leer, una historia que todos deberíamos conocer, porque querer es poder, y una vez más, no hay imposibles que valgan.
Que Ana no pueda ver no es impedimento para cocinar los platos que esta preciosa niña elabora, ni para captar los sentimientos de los demás, ni mucho menos para interrumpir sus sueños. Pero nada es tan sencillo como parece, Ana no nació aprendiendo y el camino ha sido duro, pero con fuerza y tesón ha sido posible y ella nos lo demuestra paso a paso.
Las preciosas ilustraciones que componen éste álbum vienen de la mano de Sonja Wimmer. Los sencillos, evocadores y tenues colores que escapan de sus pinceles, son la guinda para culminar esta joya de la literatura infantil. Canela, ralladura de limón, miel de azahar y esencia de vainilla son solo algunos de los ingredientes que Ana usa para evocar las emociones de los lugareños y transportarles a aquellos momentos que fueron, pero que ya no están.
Y aunque siempre es un buen momento para comprar un libro y teniendo en cuenta que el 23 de abril está a la vuelta de la esquina, qué mejor manera de conocer a la niña que caminaba entre aromas en compañía, por lo que te invito a que regales y descubras esta sublime historia que ya te adelanto dejará huella.
Y hasta aquí mi recomendación de la semana.
Bsss y a por el jueves...
Que Ana no pueda ver no es impedimento para cocinar los platos que esta preciosa niña elabora, ni para captar los sentimientos de los demás, ni mucho menos para interrumpir sus sueños. Pero nada es tan sencillo como parece, Ana no nació aprendiendo y el camino ha sido duro, pero con fuerza y tesón ha sido posible y ella nos lo demuestra paso a paso.
Las preciosas ilustraciones que componen éste álbum vienen de la mano de Sonja Wimmer. Los sencillos, evocadores y tenues colores que escapan de sus pinceles, son la guinda para culminar esta joya de la literatura infantil. Canela, ralladura de limón, miel de azahar y esencia de vainilla son solo algunos de los ingredientes que Ana usa para evocar las emociones de los lugareños y transportarles a aquellos momentos que fueron, pero que ya no están.
Y aunque siempre es un buen momento para comprar un libro y teniendo en cuenta que el 23 de abril está a la vuelta de la esquina, qué mejor manera de conocer a la niña que caminaba entre aromas en compañía, por lo que te invito a que regales y descubras esta sublime historia que ya te adelanto dejará huella.
Imágenes extraídas de La niña que caminaba entre aromas.- Porque siempre hay tiempo para el amor |
Bsss y a por el jueves...
SINOPSIS:
Pues me has tentado con este libro...
ResponderEliminarBesotes!!!
Que preciosidad de edición! Me lo llevó apuntado.
ResponderEliminarUn beso y gracias por la reseña.
Que maravilla!! me encantan este tipo de libros!
ResponderEliminarbesos
Yo no suelo leer álbumes ilustrados pero con esta preciosidad me has tentado.
ResponderEliminarBesos.
Que chulada!
ResponderEliminarQue maravilla me identifico mucho con la historia porque mi hijo mayor es ciego de nacimiento. Hermoso trabajo, felicitaciones.
ResponderEliminarEn dpnde puedo comprarlo???
ResponderEliminarQué bonito! Este mes voy pilladísima de dinero, pero le voy a echar una ojeada en persona y seguro que acaba cayendo!
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