Wilt - Tom Sharpe

(Opinión personal) Novela de enredo donde las haya, Wilt me ha sorprendido gratamente por los líos imposibles y enrevesados que se esconden entre sus páginas. Wilt y Eva, un matrimonio de los más aburrido no pasa por su mejor momento. Wilt no sabe como deshacerse de Eva. Eva se aburre soberanamente con Wilt. Eva conoce a Sally. Sally está casada con Gaskell, ambos son un matrimonio de los más liberal. Hay una fiesta, donde ambos matrimonios junto con otras parejas disfrutan de una agradable barbacoa. De pronto, entra en escena una muñeca hinchable, y a partir de aquí los enredos y los malos entendidos dan lugar a una serie de acontecimientos... no puedo seguir escribiendo porque si lo hago, os cuento la historia. Una cosa que hay que tener en cuenta es el año de publicación de la novela, 1976. Hay cosas que están demasiado anticuadas y otras que en la actualidad no harían ninguna gracia, como el constante planeamiento de Wilt de asesinar a su mujer. Aún con todo, y no soy de las que suelen puntuar los libros, del 1 al 10 le daría un 5... aprobado.

SINOPSIS

Una enorme farsa en la que Tom Sharpe no deja títere con cabeza. Una carcajada estruendosa arrasa a los Machistas; las Feministas; los Progresistas; los Reaccionarios; los Pobres; los Ricos; la Policía, el Mundo de la Escuela, la Misión del Enseñante, los Jóvenes, los Adultos, los Curas... y, de paso, Tom Sharpe desacraliza el Sexo; el Psicoanálisis, la Justicia, el Arte, la Ciencia, etc. El protagonista, Henry Wilt, encadenado durante años a un empleo demencial como profesor en un Politécnico, acaba de ver postergado su ascenso una vez más. Mientras, las cosas no marchan mejor en casa, donde su maciza esposa, Eva, se entrega a infinitos e imprevisibles arrebatos de entusiasmo por la meditación trascendental, el yoga o la última novedad recién olfateada. Wilt, que se siente impotente con respecto a su empleo, no vacila en entregarse a fantasías cada vez más asesinas y concretas acerca de su mujer. Tras una experiencia particularmente desagradable en casa de unos norteamericanos particularmente desagradables y una pelea con Eva particularmente desagradable, Wilt, bajo la inspiración de la ginebra, decide ensayar una de sus más vengativas fantasías, en la que colabora una espectacular muñeca hinchable. A partir de la inopinada desaparición de Eva y de una serie de equívocos en cascada, Wilt se encuentra encartado como principal sospechoso de la presunta muerte de su esposa y se pone en marcha una descomunal investigación policíaca.